Overblog
Seguir este blog Administration + Create my blog
25 mayo 2010 2 25 /05 /mayo /2010 12:02

Atabirio.jpg

En la mitología griega Atabirio era el dios más antiguo de los rodios, personificación del sol. Los cretenses que colonizaron Rodas lo hacían hijo de Preto (el primer hombre) y Eurínome (la diosa de la creación). Era una variante del dios hitita Teshup, y a su vez derivó, con la helenización de la isla, en la figura de Zeus Atabirio, una manifestación del principal dios del panteón griego. Su animal sagrado era el toro, de cuya representación, con discos solares y otras simbologías, se han encontrado varios ejemplos en Rodas. Los robos de ganado dedicado al sol son frecuentes en las historias mitológicas, y en particular en la de Autólico y Sísifo, personaje que Robert Graves cree que podría tratarse de una evolución del mismo Atabirio. En el templo que Altemenes construyó en el monte Atabirio (Rodas) había dos toros que bramaban siempre que se avecinaba una desgracia, ahuyentando así a los malos espíritus. Estrabón afirmaba que Rodas se llamaba antiguamente Atabiria en honor de este dios.

Compartir este post
Repost0
25 mayo 2010 2 25 /05 /mayo /2010 11:51

Humildad.jpg

 

Caminaba con mi padre, cuando él se detuvo en una curva y después de un pequeño silencio me preguntó:
- Además del cantar de los pájaros,  ¿escuchas alguna cosa más?
Agudicé mis oídos y algunos segundos después le respondí:
-Estoy escuchando el ruido de una carreta...
-Eso es, dijo mi padre. Es una carreta vacía.
 Pregunté a mi padre: ¿Cómo sabes que es una carreta vacía si aún no la vemos?
Entonces mi padre respondió:
 
- Es muy fácil saber cuándo una carreta está vacía, por causa del ruido.
Cuánto más vacía la carreta, mayor es el ruido que hace.
Me convertí en adulto y hasta hoy, cuando veo a una persona hablando demasiado,
interrumpiendo la conversación de todos, siendo inoportuna, presumiendo de lo que tiene,
sintiéndose prepotente y haciendo de menos a la gente,
tengo la impresión de oír la voz de mi padre diciendo:
 
"Cuanto más vacía la carreta, mayor es el ruido que hace".
La humildad consiste en callar nuestras virtudes y permitirle a los demás descubrirlas.
Y recuerden que existen personas tan pobres que lo único que tienen es dinero.
"Nadie está más vacío, que aquel que esta lleno del Yo mismo.
"Seamos lluvia serena y mansa que llega profundamente a las raíces, en silencio: nutriendo.

Compartir este post
Repost0
25 mayo 2010 2 25 /05 /mayo /2010 11:46

El-Hombre-Que-Se-Creia-Muerto.jpg

 

Había un señor muy aprensivo respecto de sus propias enfermedades y sobre todo,
muy temeroso del día en que le llegara la muerte.
Un día, entre tantas ideas locas, se le ocurrió que quizás él ya estaba muerto.
Entonces le preguntó a su mujer:
-Dime mujer ¿no estaré muerto yo?
 
La mujer rió y le dijo que se tocara las manos y los pies.
- ¿Ves? ¡están tibios! Bien, eso quiere decir que estás vivo.
Si estuvieras muerto, tus manos y tus pies estarían helados.
Al hombre le sonó muy razonable la respuesta y se tranquilizó.
Pocas semanas después, el hombre salió bajo la nieve a hachar algunos árboles.
 
Cuando llegó al bosque se sacó los guantes y comenzó a hachar.
Sin pensarlo, se pasó, la mano por la frente y notó que sus manos estaban frías.
Acordándose de lo que le había dicho su esposa, se quitó los zapatos y las medias,
y confirmó con horror que sus pies también estaban helados.
En ese momento ya no le quedó ninguna duda, se "dió cuenta" que estaba muerto.
 
- No es bueno que un muerto ande por ahí hachando árboles- se dijo.
Así que dejó el hacha al lado de su mula y se tendió quieto en el piso helado,
las manos en cruz sobre el pecho y los ojos cerrados.
A poco de estar tirado en el piso, una jauría comenzó a acercarse a las alforjas
donde estaban las provisiones. Al ver que nada los paraba, destrozaron las alforjas
y devoraron todo lo que había de comestible.
 
El hombre pensó:
- Suerte que tienen que estoy muerto que si no, yo mismo los echaba a patadas.
La jauría siguió husmeando y descubrió al burro atado a un árbol.
Fácil presa era de los filosos dientes de los perros. El burro chilló y coceó,
pero el hombre sólo pensó qué lindo sería defenderlo,
si no fuera porque él estaba muerto.
 
En algunos minutos dieron cuenta del burro, sólo unos pocos perros seguían royendo algún hueso.
La jauría, insaciable, siguió rondando el lugar.
No pasó mucho tiempo hasta que uno de los perros olió el olor del hombre.
Miró a su alrededor y vio al hachero tirado inmóvil en el piso.
Se acercó lentamente (muy lentamente, porque el hombre era muy peligroso y engañador).
En pocos instantes, todos los perros babeando sus fauces rodearon al hombre.
 
-Ahora me van a comer- pensó-. Si no estuviera muerto, otra sería la historia.
Los perros se acercaron ...y viendo su inacción se lo comieron.
FIN.

 

Autor: Desconocido

Compartir este post
Repost0
25 mayo 2010 2 25 /05 /mayo /2010 11:38
 
Te recuerdo así
tu pelo en libertad
hielo ardiente
diferente a las demás
 
te recuerdo así
dejándote admirar
intocable, inaccesible
irreal, irreal
 
Fría como el viento
peligrosa como el mar
dulce como un beso
no te dejas amar, por eso
no se si te tengo
no se si vienes o te vas
eres como un potro sin domar
 
Te recuerdo así
jugando a enamorar
vanidosa, caprichosa
ideal
 
te recuerdo así
amando sin amar
impasible, imposible
de alcanzar, alcanzar
 
Fría como el viento
peligrosa como el mar
dulce como un beso
no te dejas amar, por eso
no se si te tengo
no se si vienes o te vas
eres como un potro sin domar 
 
Fría como el viento
peligrosa como el mar
dulce como un beso
no te dejas amar, por eso
no se si te tengo
no se si vienes o te vas
eres como un potro sin domar.....
Compartir este post
Repost0
25 mayo 2010 2 25 /05 /mayo /2010 11:36

Tendidos-Bajo-El-Suelo.jpg

 

Era grande la noche. Estábamos en ella
con todos los impulsos dispuestos para el beso.
Se quemó el filamento de la única estrella
y un cosquilleo eléctrico nos palpitó en los huesos.
 
La luna se estiraba como una gata en celo.
La tierra tomó un hondo tibior de carne abierta.
Docenas de emociones cayeron en tu pelo.
Nos hallamos, de pronto, con la alegría despierta.
 
Dios se encogió de un golpe y se escondió en tu traje.
El pájaro del miedo se nos fue del paisaje.
Olvidamos el alma y el pecado.
Todo nos dejó solos: la luna y el vestido.
La noche era profunda como un lecho mullido.
 
Jorge Debravo

Compartir este post
Repost0
24 mayo 2010 1 24 /05 /mayo /2010 11:58

Fegeo.jpg

En la mitología griega Fegeo era un rey de Fegea o de Psófide (Arcadia), hijo de Alfeo o de Ínaco y Melia, que auxilió a Alcmeón cuando éste huía perseguido por las Erinias. Alfesibea o Arsínoe, la hija de Fegeo, se casó con Alcmeón, pero fue abandonada al poco tiempo y no volvió a ver a su marido hasta que éste volvió para recoger el collar y la túnica de Erífile, su madre. Para que Alfesibea se lo diera voluntariamente le dijo que sólo donándolo al oráculo de Delfos podría liberarse de las erinias que aún le perseguían, pero realmente lo quería porque su nueva mujer, Callírroe, se lo había pedido como condición para seguir con él. Alfesibea se lo entregó pensando ingenuamente que así volvería a recuperar a su marido, pero un sirviente indiscreto de Alcmeón reveló a Fegeo todo el engaño. Éste ordenó a sus hijos que mataran a Alcmeón cuando saliese del palacio y Alfesibea, que no sabía nada, presenció horrorizada cómo sus hermanos mataban al que ella creía su fiel esposo. Sin dejar que su padre y sus hermanos se explicaran, los maldijo con morir antes de la siguiente luna nueva. Fegeo, intentando rehuir a la maldición, la encerró en un arca y mandó a sus hijos a que se purificasen en el templo de Apolo en Delfos.

Compartir este post
Repost0
24 mayo 2010 1 24 /05 /mayo /2010 11:36

El-Joven.png

 

No me preguntes cuántos años tengo...
Pregúntame, cuántas cartas mandé y cuántas recibí.
No me preguntes cuántos años tengo,
sino, cuántos besos dí,
Besos de amor!
 
Si la juventud en mí , todavía es una fiesta,
si aprovecho todo a cada instante, y si bebo de la taza de la vida gota a gota...
¡Entonces poco me importa cuántas gotas quedan!
No me preguntes cuántos años tengo, sino...
 
Pregúntame si tuve hijos,
Si los supe educar..., qué obras hice...
Pregúntame por mis amigos...
y si fui capaz de hacer a alguien feliz...
 
No me preguntes cuántos años tengo, sino...
pregúntame qué libros leí... por dónde anduve... qué hice...
pregúntame qué historias me acontecieron, cuántos versos escribí, cuántos leí, cuántos canté...
Y así, solamente así, por muy blancos que estén mis cabellos,
por muchas arrugas que surquen mi rostro, me podrás llamar:
 
“¡EL JOVEN!"
 
Y, quienes me vean pasar por aquí,
o por allí... no sabrán de hecho mi edad, pero tendrán la certeza de que,
¡he vivido!
 
Autor: Moacyr José Sacramento

Compartir este post
Repost0
24 mayo 2010 1 24 /05 /mayo /2010 11:34

Gris.jpg

 

Desde muy pequeño todo lo que le rodeaba era diferente,
nunca entendía por qué los demás podían disfrutar de aquellas grises tardes,
de aquellos grises juegos o de las grises historias del viejo ermitaño del pueblo.
 
Sus mayores tenían razón, no se debe jugar con el suelo mojado, no se pueden tocar los animales,
esto no se toca, esto no se hace, esto no se puede.
Estaba convencido de que los demás muchachos eran de otro mundo,
pues cuando tenían la menor oportunidad ignoraban las correctas indicaciones de los mayores.
 
Los mayores siempre tienen la razón, ¿Por qué no les escuchaban?,
¿Por qué no les hacían caso?.
Pasaban los meses y los demás niños continuaban con sus grises juegos,
sus grises risas, mientras él realmente iba por el buen camino;
aquél que los mayores le marcaban.
 
Un día, la más pequeña del grupo, se acercó y le pregunto:
¿Por qué no juegas con los demás?
¿Jugar? – contestó - Según los mayores, jugar es cosa de niños.
Pero, ¿acaso no eres tú un niño como todos nosotros? – replicó la niña –
 
Por un segundo, todo lo que le rodeaba comenzó a tomar color.
Pensó en todo aquello que según los mayores estaba bien, pero que ahora para él empezaba a ser gris.
Las palabras de la pequeña habían conseguido que, por primera vez,
diera color a todo aquello que le estaba vedado.
 
Nuestro pequeño aprendió que ser niño no es cuestión de edad.
 
Autor: Fernando Fernán Alonso

Compartir este post
Repost0
24 mayo 2010 1 24 /05 /mayo /2010 11:24
 
Sé que suena gracioso pero
Simplemente no puedo soportar el dolor
Chica voy a dejarte mañana
Me parece que sabes que hice todo lo que pude nena
Veras, mendigué, robé y pedí prestado

 
Es por eso que estoy tranquilo
Estoy tranquilo como un domingo en la mañana
Es por eso que estoy tranquilo
Estoy tranquilo como un domingo en la mañana
 
Quiero estar drogado
Tan drogado
Quiero ser libre para saber que las cosas que hago están bien
Quiero ser libre
Solo yo
Oh nena
 
Es por eso que estoy tranquilo
Estoy tranquilo como un domingo en la mañana
Es por eso que estoy tranquilo
Estoy tranquilo como un domingo en la mañana
Compartir este post
Repost0
24 mayo 2010 1 24 /05 /mayo /2010 11:20

Ten-Compasion--Amor--Piedad.png

 

¡Ten compasión, piedad, amor! ¡Amor, piedad!
Piadoso amor que no nos hace sufrir sin fin,
amor de un solo pensamiento, que no divagas,
que eres puro, sin máscaras, sin una mancha.

 
Permíteme tenerte entero… ¡Sé todo, todo mío!
Esa forma, esa gracia, ese pequeño placer
del amor que es tu beso… esas manos, esos ojos divinos
ese tibio pecho, blanco, luciente, placentero,
incluso tú misma, tu alma por piedad dámelo todo,

 
no retengas un átomo de un átomo o me muero,
o si sigo viviendo, sólo tu esclavo despreciable,
¡olvida, en la niebla de la aflicción inútil,
los propósitos de la vida, el gusto de mi mente
perdiéndose en la insensibilidad, y mi ambición ciega!
 
John Keats

Compartir este post
Repost0

Presentación

  • : Olympia
  • : Existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices por el simple hecho de haberse cruzado en nuestro camino...
  • Contacto

Categorías